El último Boletín Epidemiológico Nacional confirmó tres casos de la subvariante XFG, conocida como “Frankenstein”, en distintas jurisdicciones del país.
Se trata de una recombinación genética entre dos linajes de Ómicron, que ya circula en al menos 38 países.
Según el Ministerio de Salud, hasta el momento esta cepa no implica una mayor transmisibilidad ni produce cuadros clínicos más graves. Aun así, recomiendan completar los esquemas de vacunación, sobre todo en personas con factores de riesgo.
De qué se trata esta variante
XFG es el resultado de la combinación de las subvariantes LF.7 y LP.8.1.2 de Ómicron.
La comunidad científica la denomina una “variante bajo monitoreo” (VUM), mientras que su nombre popular proviene de la naturaleza híbrida del virus, comparada con el personaje creado por Mary Shelley.
La recombinación de variantes es un fenómeno natural en la evolución del SARS-CoV-2 y puede otorgar al virus características que faciliten su adaptación o propagación. Por eso, las autoridades sanitarias insisten en el seguimiento activo mediante vigilancia genómica.
Casos nacionales
Los tres casos de XFG fueron detectados en las semanas epidemiológicas 26 y 27 por el Instituto Malbrán, con apoyo de la Red Nacional de Virus Respiratorios. Se identificaron dentro de un total de 164 muestras, en un contexto de circulación baja del virus a nivel nacional.
Actualmente, las variantes predominantes en Argentina son LP.8.1 y XEC, ambas también linajes de Ómicron. El informe oficial destaca que XFG representa el 3,37% de las muestras analizadas, pero que su presencia ha crecido en las últimas semanas.
Atención a los síntomas
Una de las señales más características de esta variante es la ronquera o afonía. También se reportan fiebre, dolor de garganta, tos seca, fatiga y malestar general.
En algunos casos pueden aparecer síntomas gastrointestinales como náuseas, vómitos o diarrea.
Expertos aclaran que los síntomas no son más graves que en otras variantes, pero sí pueden presentarse de forma más notoria en la zona de la garganta y laringe.
Las autoridades sanitarias insisten en la importancia de mantener al día los refuerzos de la vacuna, sobre todo en adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
Se recomienda usar barbijo en espacios cerrados o poco ventilados, ventilar ambientes, y evitar el contacto cercano si se presentan síntomas.
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