El Grupo Clarín, a través de Telecom, concretó este martes la compra de las operaciones argentinas de Telefónica por un monto de 1250 millones de dólares. Así lo confirmaron fuentes empresariales desde Madrid a medios locales.
La compañía española decidió desprenderse de su filial argentina para concentrarse en mercados europeos, estrategia que generó interés en múltiples grupos inversores internacionales.
En declaraciones a Napalm, por Radio Provincia AM1270, Graciana Peñafort manifestó que la compra de la filial argentina de Telefónica por parte del Grupo Clarín, a través de Telecom, “es una historia que ya vimos y vivimos”.
Además, se refirió la reacción del gobierno de Javier Milei que, a través de la Oficina del Presidente, advirtió que aún resta la aprobación del Ente Nacional de Comunicaciones y la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia. Al respecto, sostuvo que el posicionamiento no la sorprendió ya que “la adquisición implica para la Argentina una verdadera amenaza para cualquier gobierno”, por lo que “el presidente Milei y su personal entienden que están ante un verdadero peligro”.
Tras la edición de la entrevista que ofreció al canal TN, la también legisladora porteña sostuvo que el Jefe de Estado “ya probó en carne propia” cómo el Grupo Clarín “te pica el boleto”, por lo que en este caso “tomó una actitud defensiva”.
Ante el argumento que esgrimieron desde Casa Rosada, la abogada sostuvo que “es difícil creer en los controles regulatorios de parte de un Gobierno que no cree en ellos”, al tiempo que aclaró que “me cuesta creer en la posibilidad de controles porque están infiltrados por los grandes estudios de la Argentina que no van a pelearse con Clarín”. De todos modos, agregó que “si fueran efectivos no se debería aprobar esta adquisición”.
Por otra parte, advirtió que la compra de Telefónica por parte del Grupo Clarín “significa una concentración superior al 70% y esto va a tener un impacto directo en nuestro sistema de comunicaciones”. Peñafort dijo que se trata de “una situación muy extraña y grosera ya que estos niveles de concentración no son permitidos en ningún lugar del mundo occidental porque son un peligro”.
Por último, afirmó que Milei probó un poco del poder que tiene el Grupo Clarín y “la posibilidad de visibilización de determinados temas en lugares que son ámbitos de batalla de los libertarios y los han perdido”.